El martes 15 de marzo de 1921, Nicolás Jessen presenció un asesinato en las calles de Berlín. Un hombre joven disparó a un individuo de fuerte contextura, que resultó ser Talaat Pashá, ex Grand Vizir del Imperio Otomano. Este acto fue realizado por Soghomón Tehlirian, quien buscaba vengar a su familia masacrada durante el genocidio armenio.
Tehlirian fue absuelto por la Corte Criminal de Berlín después de afirmar que actuó impulsado por un shock emocional y un deseo de venganza irreflexivo. Este acto formaba parte de la Operación Némesis, llevada a cabo por militantes reclutados por el Partido Tashnag para ejecutar a los responsables del genocidio armenio en una cacería por la justicia.
La historia de estos vengadores armenios, incluyendo a Tehlirian, es ejemplar por su determinación y eficacia en la búsqueda de la justicia. A pesar de las dificultades, lograron llevar a cabo sus objetivos sin victimizar a inocentes, demostrando su compromiso con la memoria de sus seres queridos y su pueblo martirizado.
También te puede interesarLa epopeya de Aintab: una historia gloriosa del pueblo armenioLa Operación Némesis fue una cacería humana sin precedentes, llevada a cabo en diferentes continentes y con una precisión sorprendente. A través de estos ajusticiados, como Talaat Pashá, los vengadores armenios buscaron hacer justicia por los crímenes cometidos durante el genocidio.
El legado de Soghomón Tehlirian y los demás héroes de la Operación Némesis perdura como un símbolo de la lucha por la justicia y la memoria de las víctimas del genocidio armenio. Su valentía y determinación inspiran a seguir luchando por la verdad y la justicia, en honor a aquellos que perdieron sus vidas injustamente.
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