Jabón casero de fresa: paso a paso

Hacer jabón de fresa es una actividad divertida y creativa que puede tener beneficios para la piel. La fresa es rica en vitamina C, ácido salicílico y antioxidantes, lo que la convierte en un ingrediente ideal para el cuidado de la piel. En este artículo, compartiré contigo una receta sencilla para hacer jabón de fresa en casa. ¡Sigue leyendo para descubrir cómo!

Ingredientes necesarios

Para hacer jabón de fresa, necesitarás los siguientes ingredientes: aceite de coco, aceite de oliva, aceite de almendra, aceite esencial de fresa, colorante natural (opcional), sosa cáustica, agua destilada, puré de fresas frescas o congeladas, y moldes para jabón. Estos ingredientes son fáciles de conseguir en tiendas especializadas o en línea. Asegúrate de seguir las medidas exactas para obtener un jabón de calidad.

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Para comenzar, mide con precisión la cantidad de sosa cáustica y agua destilada que necesitas. Es importante seguir las instrucciones de seguridad al manipular la sosa cáustica, ya que es un producto químico corrosivo. Luego, mezcla la sosa cáustica con el agua destilada en un recipiente resistente al calor y revuelve hasta que se disuelva por completo. Deja esta mezcla en un lugar seguro para que se enfríe mientras preparas los demás ingredientes.

Paso a paso

1. En un recipiente grande y resistente al calor, combina el aceite de coco, aceite de oliva y aceite de almendra. Calienta la mezcla a fuego medio-bajo hasta que se derritan por completo y alcance una temperatura de alrededor de 40-50 grados Celsius.

2. Una vez que la mezcla de aceites esté a la temperatura adecuada, añade el puré de fresas frescas o congeladas y revuelve bien para que se integren. El puré de fresas no solo aportará un delicioso aroma a tu jabón, sino que también le dará propiedades hidratantes y antioxidantes.

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3. Luego, agrega el aceite esencial de fresa y el colorante natural si lo deseas. El aceite esencial de fresa intensificará el aroma de las fresas en tu jabón, mientras que el colorante natural le dará un tono rosado o rojizo característico de las fresas. Mezcla bien todos los ingredientes para que se distribuyan de manera homogénea.

4. Una vez que la mezcla esté lista, incorpora cuidadosamente la mezcla de sosa cáustica y agua destilada. Es importante hacerlo lentamente y con cuidado, ya que esta acción generará una reacción química que comenzará a espesar la mezcla.

5. Continúa mezclando hasta que la traza, es decir, la marca que deja la mezcla al caer desde la cuchara, se mantenga por sí sola en la superficie. Este es el momento en el que debes verter la mezcla en los moldes para jabón, que previamente habrás preparado y engrasado para facilitar el desmoldado.

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6. Deja reposar el jabón en los moldes durante al menos 24 horas para que endurezca y adquiera consistencia. Después de este tiempo, desmolda con cuidado y corta el jabón en las formas deseadas. Luego, deja curar el jabón durante aproximadamente 4-6 semanas en un lugar fresco y seco antes de usarlo.

Al seguir estos sencillos pasos, podrás disfrutar de tu propio jabón de fresa casero, que además de ser una delicia para los sentidos, brindará a tu piel los beneficios de este delicioso fruto. Anímate a experimentar con diferentes ingredientes y fragancias para crear jabones únicos y personalizados. ¡Diviértete en el proceso y disfruta de los resultados!