Este artículo habla sobre el libro «Nada de lirismo» de Ana Arzoumanian, donde se narra la historia de una militante armenia en los años setenta en Valentín Alsina. El texto utiliza técnicas narrativas que introducen diversas voces contrapuestas y simultáneas, fragmentando la historia entre pasado y presente.
Cancionero revolucionario armenio
El libro aborda la formación de una militante armenia y el desarrollo del discurso militante argentino, explorando estrategias militarizadas del deseo y una entrega extrema hasta la inmolación.
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Se menciona la música de Diamanda Galás, de origen greco-norteamericano, que utiliza técnicas multifónicas para producir sonidos divergentes. Se destaca la introducción de máquinas y sus ruidos en la música contemporánea, cuestionando la armonía del siglo XVIII.
Estética y narrativa
El libro «Nada de lirismo» utiliza una estética multifónica en el lenguaje, introduciendo varias voces en el relato y entrecortando la historia entre pasado y presente. Se busca transmitir sensaciones y provocar una turbación, desmitologizando ideas preconcebidas sobre patria, familia y nacionalidad.
Exploración temática
El texto se adentra en el resentimiento del programa peronista y el odio como legado genocidiario, planteando preguntas sobre el espacio para el amor. Se aborda el fuego, la sangre y el sexo como elementos entrelazados en la narrativa.
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«Nada de lirismo» de Ana Arzoumanian es un libro que desafía las convenciones narrativas y busca profundizar en las tensiones históricas y personales que rodean a sus personajes. A través de una narrativa multifónica, el texto invita a reflexionar sobre la complejidad de las identidades y las experiencias de los individuos frente a la historia y la política.