La nueva película de Nora Martirosyan, titulada «Debería caer el viento», ha sido seleccionada para participar en la 73° edición del Festival de Cannes. La película, producida en conjunto por Sister Productions (Francia), Kwassa Films (Bélgica) y Aneva (Armenia), narra la historia de Alain, un auditor internacional enviado al aeropuerto de Artsaj para aprobar su reapertura. En su camino, se encuentra con Edgar, un niño de la región con un curioso negocio improvisado en el lugar. La película ha sido elogiada por su narrativa y originalidad, y ha captado la atención de la crítica y el público por igual.
